CAS/Con que ganas comenzamos este 2022…
Seguramente todos y todas deseamos dar carpetazo a unos años complicados y para muchos de nuestros socios, para olvidar.
Pues eso, intentaremos olvidar la historia de estos dos últimos años, pero no olvidar la historia que nuestros antepasados vivieron en alguna parte de nuestra geografía y que a lo largo de este año intentaremos revivir.
Como era el caso de esta primera salida de naturaleza que una vez más y con la ayuda de la Diputación Foral de Álava podemos ofrecer a usuarios de diferentes asociaciones, socios y voluntarios de Montes Solidarios.
Recorrer el Cerro de Jundiz y subir a la cima del Inglesmendi, no es una misión complicada ni mucho menos. Aun así y viviendo muy cerca de este desconocido entorno, nos propusimos mostrárselo a un buen grupo de usuarios y voluntarios de la asociación. Recorrido sencillo, corto, con muy poco desnivel, pero edulcorado por dos guías interpretes que nos han trasladado a la edad media y a las guerras carlistas donde este bonito enclave fue protagonista de duras batallas que marcarían la historia.
El grupo de guías y voluntarios de Montes Solidarios sigue creciendo y sigue expandiéndose. No solo contamos con voluntarios y voluntarias de Álava, poco a poco se acercan personas de otras comunidades con intención e ilusión por participar en nuestras actividades. Cosa que nosotros agradecemos tremendamente.
Esta vez contábamos con nuevas incorporaciones que por primera vez guiaban con una barra direccional, o ayudaban en el pilotaje de la silla Joelette.
También la familia de usuarios y usuarias va creciendo y en esta ocasión contábamos con varias familias que no se resistían a seguir escuchando lo que los demás les decían que veían en nuestras salidas, sino que se animaban a vivir ellos y ellas en primera persona.
Esta primera salida era el escenario perfecto. Ruta corta, interpretada con mimo y con guías y voluntarios veteranos que ayudaban y enseñaban a las personas nuevas.
De nuevo podíamos escuchar aplausos de ánimo a los más rezagados, risa, buenas charlas y mucha complicidad entre voluntarios y usuarios.
Una buena mezcla entre montaña, solidaridad, cultura, historia, e ilusión que de nuevo vuelven a marcar las salidas de naturaleza de Montes Solidarios, y nos deja suponer que este 2022 viene cargado de emoción por vivir, y por hacer sentir.
El comienzo ha sido bueno, el camino puede ser mucho mejor. ¿Te animas?
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